Lo peor de todo es que los responsables de esta situación extrema son esos políticos nacionalsociatas malnacidos que se llenan la boca con gilipolleces absurdas e inmundas mientras provocan que el ciudadano normal y corriente de toda la vida se acabe yendo a vivir bajo un puente ante su ineptitud a la hora de dirigir un país. O tal vez más que ineptitud sea directamente maldad. Y es que cuando hay un problema, lo más lógico es admitirlo y buscar soluciones. Evidentemente si uno no quiere admitir la cruda realidad es porque no quiere solventar la catastrófica situación. Y si no la quieres solventar es porque directamente eres un hijo de puta. Sabes que tus conciudadanos se mueren de hambre, se quedan sin vivienda, van directos a la muerte por inanición, y a ti eso te la suda. Pasas de buscar solución, mejor que se dediquen a mendigar o directamente que se mueran, porque eres un chulo cabrón a quien le interesa una puta mierda la vida de las personas. Eso es maldad.
Y más culpa de todo esto tienen aún los votantes de este subpartido de malnacidos. Gentuza que se dedica a insultar a los que no piensan como ellos, cuando en realidad si la gente tiene ideas divergentes es posiblemente porque se muere de hambre. Pero esa es la tolerancia y el talante que tienen, así de comprensivos y de solidarios son. Eso son los votantes del PSOE, unos hijos de puta que, cuando tú reclamas trabajo y dinero solamente para comer y vivir, se ríen en tu cara, te llaman fascista, machista, racista y cuarenta mil gilipolleces más y te desean la muerte. Por supuesto que sí, eso es lo que quieren, desean y les hace más gracia. Podéis seguir carcajeándoos de la gente que no tiene un duro por vuestra culpa, porque eso es lo que más os gusta. Por eso dais vuestro voto a un partido asesino de vuestros conciudadanos, porque sois unos malévolos hijos de la gran puta. Es lo que más os encanta, que los que no piensan como vosotros se mueran. Eso es maldad.
Pues yo desde aquí voy a hacer un llamamiento. Como lo de ser Jesucristo y poner la otra mejilla no me va mucho, y como lo de irme a vivir bajo un puente y morirme de hambre tampoco, lo voy a dejar bien claro. Hago pues un llamamiento a toda persona de buena voluntad para dar su merecido a toda esta pandilla de hijos de puta. ¿Que cuál es su merecido? Pues a buen entendedor, pocas palabras bastan. Y si queréis taparme la boca como lo que sois, unos jodidos nazis censores, venid a por mí que os estoy esperando. Ya estoy tan desesperado y hasta los cojones, que si me tengo que cargar a alguien, lo haré. Al fin y al cabo en la cárcel hay techo y comida. Sociata bueno, sociata muerto.