Además es que hoy el pájaro, como intuyendo que el vikingo iba a escribir unas líneas sobre él, ha decidido erigirse en protagonista de la actualidad nacional con unas declaraciones muy en su línea, acaecidas en un programa radiofónico matutino. El tipo se refería a la nueva propuesta de la oposición en materia de inmigración como "algo ridículo". Se ve que él no se ha mirado al espejo. O sea, colega, que ahora lo que hacen la práctica totalidad de los países del planeta que reciben inmigración es "algo ridículo". O sea, amigo, que ponerse de una puta vez a la altura del resto de naciones del mundo en esta materia, tú lo calificas de "inútil". Claro, hombre, como aquí el único iluminado eres tú, pues venga, majo, corta tú el bacalao, impón tus maravillosas medidas revolucionarias como hasta ahora y sigue prohibiendo todo lo habido y por haber, mandando a la gente al paro y sumiendo a tu país en una crisis nunca antes vista por los ojos de los maltrechos ciudadanos. Esto es lo peor de este tipo de nazis perturbados, que no sólo se dedican a hacer aberraciones políticas sino que además se creen los putos reyes del mundo. Venga, coño, un médico valiente ya que ingrese a este tío en un psiquiátrico o acaba con nosotros.
Otra muy buena acaecía apenas hace unos días en TelePSOE (también conocida como Cuatro), donde el servilista hijo de perra Gabilondo entrevistaba a este enfermo mental a preguntas pactadas (además es que ni se molestaron en ocultar que lo estaban). Al acabar la entrevista y en un impresionante fallo técnico (el responsable ya estará de patitas en la calle) se pudo escuchar al subpresidente, creyendo estar los micrófonos cerrados, confesar a su marioneta Gabilondo que su partido necesitaba que hubiera "tensión" para ganar las elecciones. Esto es buenísimo, sobre todo después de tirarse cuatro años acusando a la oposición de ser ellos quiénes creaban la famosa crispación. Parece que, al igual que al Piolín Blanco, a este hijo de puta ya se le está empezando a caer la careta y nos está mostrando con toda claridad que su tan radiado "talante" no es más que una forma de encubrir sus ansias totalitaristas al más puro estilo de la Alemania de los años 30 y 40.
Y vosotros os preguntaréis, ¿cómo coño ha llegado este tío hasta dónde está? Bueno, todos recordáis que en realidad el muy hijo de puta tiene la poltrona manchada de sangre, puesto que la única forma que encontró para llegar a la Moncloa fue "en tren". ¿Pero de dónde ha salido este enfermo mental? Nacido en Valladolid, criado en León, castellano de pura cepa, como veis, aunque el tipo sea un auténtico forofo del FC Barcelona y esté un tanto obsesionado con los catalanes (luego veremos por qué). Ah sí, se me olvidaba comentar algo para él tan importante como que su famoso abuelo al que tanto cariño tenía (y que nunca llegó a conocer) combatía en el bando republicano en la Guerra Civil Española, y murió con las botas puestas. A pesar de ser un hijo de puta, el subpresidente, como todas las personas de este planeta, tenía también otro abuelo, el cual pertenecía al otro bando, pero suponemos que en su enfermiza mente no hay cariño para los dos. ¿Serán los efectos de una familia desestructurada? No, creo que no.
Con 18 añitos ya se enroló en el partido choricero que por aquel entonces era el PSOE. No se sabe quién fue la lumbrera que le firmó el carnet, pero habría que enganchar a tan nefasto personaje y colgarle por los huevos, porque vaya tela. Su primer cargo de renombre lo situaba como responsable del sector de la agricultura y ganadería en la Diputación de León. Aquí es donde su brillante mente comienza a iluminarse, con una ya famosa y muy recordada (sobre todo en la zona) reconversión del sector que iba a beneficiar a todos los trabajadores con unas nuevas miras económicas y bla bla bla... Resultado: más de la mitad de los ganaderos y agricultores leoneses al paro. Ante la cantidad de manifestaciones y protestas que hubo a causa de dicha situación, de repente alguien tuvo el suficiente sentido común como para aconsejarle que se alejara de allí y buscara nuevos rumbos políticos. Y así cayó en Madrid, en mitad de la crisis más grande del PSOE en toda su historia ante el descalabro sufrido en las últimas elecciones generales por parte del mecánico Almunia.
No se sabe muy bien cómo, este visionario de tres al cuarto encontró suficientes apoyos para sustituir al mecánico al frente del partido. Bueno, sí que sabemos cómo, con una dosis de buena suerte, el desconocimiento que había sobre su persona, la baja de uno de los principales favoritos por enfermedad, y ¡cómo no! el apoyo del Partido Socialista de Cataluña. Gracias a los votos de estos últimos, nuestro amigo ZP consiguió aventajar por la mínima a los otros dos grandes candidatos en la pugna, José Bono (ejjjj queeee...) y la flower power Trinidad Jiménez. Y ahí estaba, el totalitarista autoritario más grande de la historia de España, al frente del partido que iba a desgobernar, manipular, asesinar, insultar, destruir y hacer el cafre durante el más oscuro y deprimimente período de tiempo en la política de esta nación. El resto, como ya sabéis, es historia.