Cada vez que leo la prensa en este país de gilipollas realmente me asusto, así que ya tengo decidido que lo único que podemos hacer en este estercolero en que se ha convertido España es emigrar. Porque Zetahijodeputa y los suyos son unos hijos de puta malnacidos lunáticos y sinvergüenzas, pero lo peor de todo es que como todavía hay tanto SUBNORMAL que sigue apoyándoles y votándoles, van a volver a ganar las elecciones y van a continuar con su recital de joder vidas y amargar existencias. Así que conmigo ya no contéis para nada, españolitos de mierda, que os den por el culo a todos, si queréis fiesta, tenedla hasta al final, y la pena es que no haya una guerra que haga volar por los aires de una jodida vez este asqueroso país lleno de imbéciles. No, no puede haber guerra porque la gilipuertez extrema llega a tal punto que por mucho que al ciudadano español se le joda y se le dé por el culo, va a seguir asintiendo como un puto borrego que va al matadero y actuando como un puto zombie alelado que sólo sabe conducir a 110, ver el fútbol y a Belén Esteban y llamar facha a todo el que fume. Que os follen ya, capullos.Pero vuelvo a lo de la prensa. Leo y me horrorizo. Pareja de novios que se casan, bodorrio por todo lo alto con el típico convite, papeo desmesurado y demás zarandajas. El novio, ya marido, comienza a mamar más de la cuenta, lo típico en días así, baila con una, con otra y con la de más allá, y broma tras broma, continúa el jolgorio entre risas, colegas y familiares. La novia, ya esposa, también mamada hasta las cejas, explota en celos porque además de bailar y reírse con ella, lo hace también con una, otra y la de más allá, y decide que hay que dar una lección al recién estrenado maridito. Así pues, y desde el mismo salón donde se celebra el convite, decide llamar a la madera y comunicar que el mismo día de su boda, su hombre ya le ha puesto la mano encima, que es un maltratador, un machista, un hijo de lo que sea y seguro que también un facha y un xenófobo, porque si no, no queda progre la cosa.
Y allí que la poli irrumpe cual cuerpos antidisturbios en pleno banquete, tiran al novio contra la pared, le leen sus derechos (o no, que no me extrañaría), le esposan como a un perro y se lo llevan casi a hostias derechito a pasar su noche de bodas en un oscuro calabozo. Crudo, duro, patético y lamentable, pero por desgracia más que real en este país del absurdo, la sinrazón y el fascismo feminazi del colectivo zetaparil. El caso es que hasta dos días con sus respectivas noches se tiró el pobre hombre encerrado cual peligroso criminal y tratado como una mierda por la policía del régimen hasta que a la señora, libre ya de cogorza, que seguramente no de odio, se la llamó a declarar para ver qué cojones había pasado realmente. Contradicciones, una detrás de otra que hicieron más que sospechar a algún avispado poli, juez o secretario judicial, que aquello de los malos tratos era una historia más falsa que un billete con la cara de Jesús Gil. Y que dé gracias el señor marido a que alguien se dio cuenta a tiempo, que si no ahora mismo estaría pasando los primeros años de su matrimonio más enrejado que un gorila en un zoológico.
Pero así de guays somos en este país donde para celebrar el día de la mujer trabajadora, celebración más que cachonda en un país con un 35% de paro real, se pone como maestra de ceremonias a la travesti subministra de sanidad, que por cierto poca sanidad e higiene tiene consigo misma porque es una GUARRA de agárrate y no te menees. Todo un ejemplo de trabajo una persona que no ha trabajado absolutamente de NADA en toda su puta vida. Y mientras todo esto acontece y el país se sigue desmoronando (aunque poco quede ya en pie) por los cuatro costados, continúo leyendo la prensa y me hago eco de una noticia que habla sobre la multa impuesta a una empresa por poner una oferta de empleo que rezaba "buscamos programador" en lugar de "buscamos persona que programe". Pues la cifra no es una broma, de esas de tres ceros, vamos. O sea que, tal es el chorrismo estúpido y la gilipollez absoluta y desmesurada de este desgobierno de lunáticos enfermizos que, a una de las pocas empresas que puede ofrecer empleo en esta aberrante situación laboral a la que nos han llevado semejantes INÚTILES desgubernamentales, resulta que se le imponen sanciones económicas de corte feminazi. Es ya la idiotez congénita elevada a la enésima potencia. Pero no pasa nada, españolitos, a seguir votando PSOE, que de donde no hay no se puede sacar. IMBÉCILES.
