lunes, 28 de mayo de 2012

Trabajo y más trabajo

Llevamos una puta semana de calor que es inaguantable. Dicen que es una ola de vientos africanos o algo así. O sea, que vamos a parar a lo de siempre, la enfermedad siempre viene del sur. Ayer fue especialmente desagradable, el típico viento que suele asolar esta ciudad, normalmente gélido, era tórrido, una calina de ésas que parece que te saque los ojos de las cuencas. Lo peor es que dicen que aún queda una semana más de este macabro temporal de sol y calor extremo. No me reconforta la idea de saber que me voy a pasar unos días al norte, más allá incluso de las tierras altas, hasta la Dunnet Head y los confines de la mainland, básicamente hasta donde Cristo perdió el gorro, por así decirlo.Y digo que no me reconforta, porque las temperaturas suelen ser las mismas por allá arriba que aquí abajo en la civilización. Así que nada, a pasar calor por arriba, por abajo, por delante y por detrás. Y no te pongas cachondo con lo de detrás, Zerolo, que nos conocemos, pero yo paso de tu rollo asqueroso, maldito degenerado de los cojones.

El caso es que entre toda esta calina voy a ver si cambio de trabajo. Sí, trabajo, españolitos, ¿os gusta la palabra? La cuestión es que sin comerlo ni beberlo me han llamado de un nuevo sitio. Cuando uno tiene una buena reputación en su puesto habitual, no es extraño que se corra la voz y alguien de la competencia te quiera reclutar para sus filas, obviamente siempre ofreciendo algo más. Así que la entrevista que voy a mantener dentro de un par de horas no es como ésas que tenía en el país de los memos, deprimentes y vejatorias, donde después de interrogarte sobre las veinte mil chorradas que poco tenían que ver con la función que ibas a desempeñar, te decían que como no eras mujer maltratada, negro, sudaka, maricón o alguna cosa rara, no te podían dar el trabajo porque no eras "guay". Las piltrafas que trabajan en recursos humanos de las empresas en España se deben de pensar que son lo más de lo más, y luego les dejas en ridículo cuando te quieren intentar entrevistar en inglés o hablar de números cuando no saben ni sumar dos y dos. Pero no se les cae la cara de vergüenza, no, qué va, debe ser que le votan al PSOE y quieren emular a sus incompetentes ídolos. Pero a lo que iba, que en esta entrevista voy a ser yo el que ponga condiciones y el que diga qué es lo que quiere. Y si la empresa me quiere realmente, cederá. Y ésta es la ley de la oferta y la demanda en un país normal, no la ley del chantaje a la que los idiotizados españolitos ya están más que acostumbrados en los últimos años.

Pues mira, igualito que en España. Allí me tiraba tres años sin que nadie me quisiera contratar ni por activa ni por pasiva. No veía un duro, me moría de hambre y de cuando en cuando la policía venía y me detenía porque son así de chulos. Aquí no es que tenga trabajo, como toda persona normal, es que encima me llaman de otros sitios donde también quieren y requieren mis servicios, tengo donde elegir y puedo vivir tranquilo y feliz. Y sin embargo, y a pesar de que todo esto lo estoy experimentando en mis propias carnes dentro de mi cotidianidad, aún escucho las voces de gentuzas varias, de auténticos imbéciles profundos, de malas personas, de perturbados mentales, de PROGRETAS PSOÍSTAS, que se llenan la boca con la falacia de la crisis a nivel europeo o mundial, con que hay sitios mucho peores que España, con lo bueno que era Zetaparo y lo bien que lo ha hecho el PSOE, y con lo bien que se vive en España, en definitiva, gracias a su enfermiza enfermedad progreta. No es cuestión de dar a esta escoria humana por imposible, es que están mintiendo y jodiendo las vidas de las personas debido a su jodida tara mental. No se puede permitir ni un segundo más que personajes de esta calaña sigan circulando libremente por el mundo. Exterminio de hijos de puta ya mismo.

lunes, 21 de mayo de 2012

Cine español

Ayer tenía yo una especie de debate con algunas otras personas sobre el patetismo del cine español de hoy en día. No voy a hablar sobre la politización de los cejudos, sobre su miserabilidad y sobre la gentuza que hay metida en todo ese negocio que de séptimo arte tiene bien poco y de chupar del bote a base de hacer el gilipollas tiene demasiado. Es la enésima idiotez de un país que se ha ido a tomar por culo a base de bien, su cine, por llamarlo de alguna manera, porque es una vergüenza tener que usar la misma palabra para esa bazofia que para obras maestras como El Puente Sobre El Río Kwai o Lo Que El Viento Se Llevó, por poner dos ejemplos rápidos. Pero pasemos a los puntos más interesantes de ese debate que comentaba que tuvo lugar ayer entre simples entendidos de salón de casa.

Alguien sacó a la palestra el cine que se realizaba en España hace ya muchos años, en los años 50 ó 60. Salieron a colación las películas de Marisol, que si eran ridículas, que si reflejo de otros tiempos, que si tal y cual, y por supuesto, siempre hay quien tiene que tildar estas películas, porque su mente no da para más, de fachas. Ya salió la palabreja de marras. No sé qué carallo tendrá la señorita Marisol de facha, ya que algún imbécil siempre lo puede mencionar, pero en cualquier caso prefiero esas películas "fachas" que inciden en los valores humanos, en el compañerismo, en la bondad y en intentar tocar el corazón del espectador, que las aberraciones sexuales de cuatro maricones intentando meterse un cáctus por el culo, cuando no se están chutando en el brazo mientras una puta se la chupa a un viejo. Sí, ésos son los maravillosos valores del cine progreta pro-psoísta.

No es que tenga nada en particular contra el sexo en el cine, pero lo de los "cineastas" (o lo que sean) españoles yo creo que ya sobrepasa el grado de obsesión. Coño, si quieres ver folladas, pues te ves una peli porno y punto, y acabas antes y te dejas de dar rodeos. Pero es que toda peli española de mierda tiene su escena gratuita de folleteo. Y digo bien, gratuita, porque ni representa nada en el guión, ni es indispensable y ni tan siquiera tiene una realización y fotografía digna de admiración. Follar por follar, porque la actriz tal quiere demostrar que es más guarra y liberal, progreta y votapsoe que nadie y ahí que saca sus tetas, su coño y su orgasmo fingido con el que directamente lo único que consigue es que te dé un apretón y te largues a cagar mientras ella hace de putón en la pantalla. ¿Cómo se llamaba esa película sobre etarras, Lobo? Creo que sí, una peli sobre terroristas en la que, sin venir a cuento, pam, folleteo. En fin, que no sé por qué me ha venido ésa a la mente, pero vamos, cualquiera de las que cojas del desafortunadamente extenso catálogo de aberraciones cinematográficas progretas, va por el mismo camino.

Dentro del mencionado sexo gratuito, ya directamente podemos, en muchas de estas subvencionadas bazofias, entrar en el exceso degenerativo máximo. Es otro tema, lo sé, el hecho de que sean los propios ciudadanos de la calle, los que a través de sus impuestos y sanciones recaudados por el Estado, que luego invierte en subvenciones casi del 100% hacia esta porquería, paguen esta mierda de cine prácticamente en su totalidad. Pero eso, la degeneración. Ya no sólo son escenas de peña que ni nos va ni nos viene teniendo relaciones sexuales. En un alto porcentaje estas escenas son burradas y chaladuras únicamente salidas de cerebros con auténticos problemas mentales. Maricas practicando las cerdadas más variadas, bolleras, putas ultra-degeneradas, zoofilia e incluso pederastia. Extremo este último más agravado todavía si cabe en la vida real cuando todo este colectivo de escoria humana que representa al cine español, pidió hace algunos años al más que concesivo desgobierno de Zetamierdoso el magnífico, que todas estas aberraciones cinematográficas tuvieran el grado de visibilidad para todos los públicos en las salas de cine del país. Cerdos enfermizos, hijos de la gran puta.

Aunque todo esto va muy en la línea de las doctrinas, los dogmas y las enseñanzas del degenerado, enfermizo, perturbado y la vez inútil PSOE de los últimos años de reinado progreta. El mariconazo de Zerolo yendo de colegio en colegio dando charlas sobre enculadas a niños de 11 años, pastillas para abortar para niñas de esa misma edad, manuales de mierducación para la ciudadanía donde su incitaba a los niños a poner en práctica todo tipo de aberraciones sexuales, incluidas la zoofilia y la plantofilia (¿se dice así?). Qué asco. ¿De dónde salen mentes tan jodidamente enfermas? ¿Qué putos problemas de juventud o niñez han tenido estos asquerosos para terminar de esa manera? Y lo que es más grave, ¿cómo se ha podido permitir llegar a la poltrona a gente con semejante tara mental? En cualquier otro lugar del mundo hubieran sido puestos a buen recaudo en un sanatorio para locos ultra-peligrosos o directamente lapidados. Pero en España, ya se ve lo que hay, a mandar y dirigir a cincuenta millones de personas. Resultado: país destrozado para siempre. Qué progre.

lunes, 14 de mayo de 2012

Maleducados

Tenía sed. Así que me bajé al supermercado más cercano a ver si había alguna cervecita en oferta para poder refrescarme el gaznate durante un par de horas mientras me ponía de fondo a Pink Floyd o a George Harrison. Y sin ofertas especiales siempre está la maravillosa caja de pintas, bien de Tennent's, Foster's o Carling, que una vez comprada la metes en la nevera y ya no tienes que preocuparte por tu sed etílica en varios días. A no ser que seas un auténtico alcohólico, que entonces la caja no te dura ni media hora. Pero bueno, para tener un momento de relax, un par de pintas o tres mientras escuchas buena música nunca están de más. O sea que, a lo que iba, que salí a la calle, buena temperatura, sol brillando entre nubes y claros, y un par de manzanas más allá de mi morada, el Tesco. Vamos, que las cervecitas estaban a tiro de piedra y allí que iba yo.

Algún día hablaré de la experiencia Tesco o de la ruta reducida, grandes entretenimientos para todo buen británico con tendencia pordioseril, pero hoy nos quedaremos simplemente con que entré en el supermercado y, aunque sólo iba a por mis cervezas, me entretuve unos minutos en mirar unos y otros artículos, las ofertas de la semana y del mes y las típicas reducciones de media tarde. Es muy reconfortante entrar en un local lleno de personas realizando las más diversas compras y apenas escuchar un solo ruido. Diría que puedes escuchar a las moscas, pero como la higiene es una pieza clave de estos locales, pues realmente no hay ni insectos por entre los humanos. Pero está muy bien, vas a comprar con tu dinero ganado con tu trabajo, puesto que tienes trabajo, es digno y llegas a fin de mes sin problemas ya que los precios están más baratos que en países con sueldos mucho más irrisorios (si es que te dejan tener trabajo), y te puedes relajar en un sitio donde nadie te molesta, simplemente te puedes centrar en el deleite de contemplar un producto tras otro y meter los que te apetezcan en tu cesta o carrito.

Pero no todo podía ser perfecto, no, alguien siempre tiene que joder la marrana. Después de un par de minutos de paseos por uno y otro pasillo, al fondo del supermercado, en la sección de frutas, se comienza a oír un escándalo, un estruendo sin precedentes en un lugar de estas características. Todos los demás clientes se giran para ver qué ocurre, las cabezas sobresalen por entre los pasillos, buscando la causa de semejante alboroto. Voces entrecruzadas, incluso gritos en extraños idiomas que nadie adivina a reconocer ni comprender. Por desgracia, semejante locura dialéctica me resulta familiar, me recuerda viejos y desgraciados tiempos. El lenguaje utilizado por esos alaridos confusos es el español. Fucking hell. No quiero ni acercarme a la zona de donde provienen los berridos, pero el tumulto se acerca a mí. No, por Dios.

Ahí están, aparecen ante mí. Tres o cuatro personas de nacionalidad española, berreándose como cosacos los unos a los otros mientras se supone que intentan realizar una compra. Que si plátanos no, que mejor peras, que si mejor que deje las cebollas, que si ese queso no me gusta, pues te jodes, que si... ¡que os calléis, coño! Afortunadamente mi aspecto no delata que puedo tener algo que ver con esa gentuza, así que ni siquiera me detectan y paso como un lugareño más entre estos inesperados zafios modales. Menos mal, porque ya tengo bastante con la vergüenza ajena que produce la mala educación de estos súbditos de la península ibérica (pobres portugueses, meterles en el mismo saco), como para que encima quieran hablar conmigo o alguna idiotez semejante proveniente de estos payasos de medio pelo. Todo el supermercado viendo el show vociferante de estos completos maleducados. Y no voy a decir ni siquiera que estábamos todos indignados, porque tal es la sorpresa de encontrarse con alguien tan soberanamente lamentable y patético en sus modales, que uno no sabe ni cómo reaccionar.

En fin, que los putos españolitos no lo pueden evitar. Son unos jodidos maleducados. Se ve que no han tenido bastante con destrozar y hundir su país a base de votos a Zetamierdoso el capullo y los progretas de turno y tener los cerebros completamente lavados por la peor televisión a lo largo y ancho del planeta, que ahora vienen a esparcir su mierda por el resto de naciones. No, hijos míos, no. Vosotros quedaos en vuestra puta mierda de país, el cual habéis jodido por vuestra propia idiotez congénita, pero aquí no vengáis a joder. Yo estoy muy tranquilo desde que un desgobierno de hijos de puta me expulsó de España, ahora no me persigáis porque me voy a cabrear muy en serio y comenzarán a rodar cabezas. Y lo digo literalmente, vamos tal y como haría Conan. Así que no me jodáis, putos españoles, no me jodáis...

martes, 8 de mayo de 2012

De locos peligrosos a atontados profundos

Ya sabemos el tipo de desgobierno que ha asolado España durante los últimos casi ocho años. De sus "hazañas" casi mejor no hablar, pero como ya sabéis me encanta insistir en el grado de perturbación mental de dicho ejecutivo. Podemos calificar a estos engendros de tarados, locos o simplemente enfermos mentales, pero la realidad es que nunca en mi vida he visto personajes que lleguen hasta tal punto de distorsión cerebral encaminada a realizar el mal. Una chaladura tras otra, la secta psoísta de Zetamierdoso el magnífico, nos ha mostrado el lado más desagradable de los problemas mentales en el ser humano. Vamos, que estos pajarracos yo creo que no tendrían cabida ni en el psiquiátrico más especial para enfermos más peligrosos y extraños que se pueda construir en todo el mundo. Son directamente carne de patíbulo, y no por una o por otra ideología concreta, sino básicamente porque no se puede dejar circular por la calle con la mayor de las tranquilidades a semejantes locos peligrosos. Y ya no te digo si encima están en la poltrona dirigiendo los destinos de una nación. Y si encima lavan el cerebro de sus idiotizados ciudadanos intentando convertirlos a todos en chalados a su imagen y semejanza, pues apaga y vámonos. Así está ahora mismo España.

El nuevo ejecutivo pepero no está loco ni es una panda de inútiles contumaces. En un principio, algunos de sus miembros reúnen buenas cualidades para enderezar el país y darle de nuevo un toque de cordura y lógica. Pero el principal problema de muchos de estos nuevos gobernantes es que están atontados, pero en un grado que realmente asusta. Les dan una bofetada y se dejan, les van a dar por culo y se bajan los pantalones y se dan la vuelta, les llaman de todo y asienten, les dicen que dimitan o se peguen un tiro y seguro que lo hacen. Sólo así se explica lo que acontece ahora mismo en España, donde la secta psoísta pone el grito en el cielo por cualquier chorrada y toca hacer caso, como si siguieran con su show del control manipulador titiritero y el lavado de cerebro continuo a toda la población. Y lo malo es que el nuevo ejecutivo, como tontos profundos que no tienen iniciativa propia, también sigue la corriente a estos hijos de mala madre intolerantes y escupebabas. Vamos, que en lugar de coger el toro por los cuernos y pegar un puñetazo en la mesa, Mariano el tibio y su gente se dedican a hacer tal o tal arreglito para no cabrear a nadie y que todos los progretas malparidos y chalados no se enfaden más de la cuenta y les llamen "fachas", que está muy feo.

Manda huevos. Ahora la moda es que el lunático PSOE dicta las perturbadas leyes que tenía en mente ejecutar si llegaba a la poltrona por tercera vez consecutiva, el atontado PP las acoge y las hace propias, y los progretas enfermizos psoístas insultan a este último partido por adoptar las medidas que adoptaría el primero. Vamos, que el PP además de puta pone la cama. En lugar de aplicar sus propias ideas, me consta que muy buenas en la teoría, por esa mierda maricomplejina que últimamente anida entre los nuevos dirigentes del PP, se adapta a lo que quieren los progres, que son chaladuras integrales que joden más todavía a la población, para que la susodicha población se vuelva contra ellos con los progretas hijos de perra a la cabeza, y todos tan tranquilos y con la más bobalicona de las sonrisas en la cara. Joder, es que el PSOE son malas personas, gentuza y escoria infrahumana, pero es que el puto PP es un nido de gilipollas profundos idiotizados. La conclusión es bien fácil, las buenas ideas se quedan en el tintero por el nosequé a que se califique al actual ejecutivo de tal o cual, los progres encolerizados revientan nuevamente las calles y al final de toda la historia vuelta del zetaparismo más rancio y perturbado a dirigir los destinos de España. Una España que, de esta forma, jamás va a tener solución. Pero es lo que hay.
 
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