jueves, 24 de junio de 2010

Sin ganas

Que nadie se preocupe. Si estoy escribiendo tan poco en el blog es porque no tengo demasiado tiempo últimamente y porque, qué cojones, tampoco estoy nada motivado, ciertamente. Ya he perdido la ilusión y la esperanza. Es evidente que en este país de gilipollas no hay remedio, este desgobierno de malnacidos ya puede hacer la cacicada más grande de las cacicadas, la burrada más anormal, la hijoputada más delictiva, que los borregos van a seguir yendo al matadero a dale su apoyo y sus votos. Así que para qué continuar con esta mierda. En fin, que cada día me da que voy a ir escribiendo menos, sintiendo también cómo mi luz se apaga, se sigue apagando y acaba muerta para el regocijo de los malnacidos hijos de perra que me han destrozado la vida. No, ya no me puedo levantar, ni me apetece. Creo que mañana me voy a dar un festival de drogas y alcohol a ver si me quedo en el sitio y ya no tengo que ver nunca más a Zetaparo y sus secuaces, a no ser cuando estemos todos allá arriba siendo juzgados por una divinidad. Ah, entonces sí, coño, entonces sí que me levantaré y os escupiré a la cara, hijos de la gran puta.

Que me enciendo, coño, y no quiero. Bueno, pues aquí estoy frente al teclado un día más, con muchas animaladas desgubernamentales hacia las que protestar pero con pocas fuerzas para hacerlo. Enchufo la radio y escucho que en Somalia se prohíbe, bajo pena de cárcel, afeitarse. Ahora que me estoy dejando barba es todo un alivio, coño, ya ves. Ya tengo un país más al que emigrar para no tener que ver ni Piolines Blancos, ni vicebichos, ni feminazis del trifásico, ni demás engendros nazisociatas malparidos. Además allí siempre puedes conseguir un lucrativo empleo de pirata asaltante de barcos españoles, total, los memos de los cojones siempre pagan. No sé yo si esta prohibición del afeitado se extenderá a España, con esto de la alianza de mierdalizaciones, al fin y al cabo a estos putos nazis psoístas les encanta eso del ordeno y mando en plan dictadores de la más baja catadura moral. De todas formas aquí se ha prohibido el burka, ah coño, pero los nazisociatas no votaron a favor de ello, ahora que pienso. Qué raro, creía que eso denigraba a la mujer. Ah, no, joder, que sólo se denigra a la mujer si el marido es español, si es un moro puede hacer lo que quiera. Ay, Dios, qué embrollo, me da que no tienen las ideas muy claritas estos sociolistos de los cojones.

No tengo ganas de liarme, no, me voy a ir a ver un capítulo de Expediente X a ver si Scully me pone a tono un rato. Joder, qué machista soy, deténgame señor juez, perdón, señora jueza. Pero bueno, que el caso es que estos tan capaces desgobernantes que tenemos ahora nos dicen que los parados se pueden meter la ayuda de 420 euros por el culo, que se la van a quitar. Ahora pongo, ahora quito, tócate los huevos y tiro porque me toca. Eso es una política seria, con rumbo y continuidad, sí señor, a votar PSOE, imbéciles profundos. Pues nada, quitamos subsidios a parados, trabajo a empleados, dinero a trabajadores, subimos impuestos a todo dios y ellos, los travelos Pajines y demás escorias cara de mármol se cobran tranquilamente unos treinta mil pavitos al mes. O más, porque lo no declarado también cuenta, digo yo. ¿O qué, señor Bono? Ya son más de las once de la noche, joder, me voy a abrir una cerveza (una tras otra, claro) a ver si me pongo a tono y caigo rápido porque para lo que hay que ver en esta vida en este país... Botarates.
 
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