Ahora una adolescente de Benicalap (Valencia) aparece muerta en el rellano de su casa. Aunque no se ha hecho investigación alguna, ni se ha tomado declaración a nadie, ya tenemos culpable, y por supuesto ya ha salido su cara en todas las televisiones y ya ha sido insultado hasta la saciedad por veinte mil pseudo-periodistas retrasados mentales. Resulta que el chaval en cuestión hace tres años mantuvo una relación sentimental con la chica, y curiosamente hace unos meses le interpusieron una orden de alejamiento hacia otra chica, pues ya está, cóctel explosivo. Lo mejor es que los noticiarios ya hasta se permiten el lujo de decir frases como "no hay pruebas contra el asesino machista, sólo indicios". La palabreja de marras no podía faltar, eso lo primero, y si no hay pruebas, ni ha sido condenado, en todo caso será presunto o sospechoso, en ningún caso asesino. Eso les da igual, por cierto, que los indicios a los que se refieren son los mencionados arriba, la antigua relación y la orden de alejamiento que, viendo la arbitrariedad con que son repartidas en este país, tiene de prueba, indicio o lo que sea, lo mismo que un trozo de papel higiénico lleno de mierda.
Yo no voy a defender al pavo en cuestión, que nadie me malinterprete, más que nada porque la pintilla de chulo gilipollas que tiene y la sobradez y altivez que dicen los que le conocen que siempre le ha caracterizado, no me molan un pelo. Pero de ahí a llamar a alguien asesino sin prueba alguna y sacar su jeto en la tele para que todo el mundo le pueda apedrear por la calle aunque no haya hecho nada simplemente por una puta moda perturbada de mierda, me parece que es ya pasarse de la raya. En este país, y con el temita en cuestión, se han perdido ya los papeles, y mucho. Y más cuando, con una desfachatez que raya en lo patético, la siguiente noticia a comentar por estos pseudo-noticiaristas de los cojones, es que un marroquí degüella a su hija de 18 años en Italia por irse a vivir con su novio católico. Y aquí, a pesar de que el moromierda sale diciendo que su hija merecía morir por su desviación antinatural y la madre justifica al asesino por los "errores" de la niña, a ninguno de estos patéticos bustos parlantes de nuestras manipuladas televisiones, se le ocurre hablar ni de machismo, ni de violencia, ni de nada de nada. Se ve que, como el puto moraco pertenece a la alianza de mierdalizaciones del degenerado loco cabrón ZP, son sus costumbres y puede rajar el cuello a quien le venga en gana. ¿De verdad todavía hay alguien que puede creer que lo que pasa en este país es normal?