Ahora resulta que Berlusconi es un putero, un sinvergüenza, un delincuente, un chorizo, una malísima persona y por encima de todo un facha y un machista. Se ve que los progretas de mierda están aburridos y ya no saben dónde ir a buscar amigos, así que parece que Italia es un buen sitio, como allí sí que se están haciendo las cosas bien en cuanto a empleo e inmigración, pues allá que van los anormales progres nazisociatas a tocar un poquito los cojones. Y todo este revuelo porque el primer ministro italiano ha salido en unas fotos en una mansición de Cerdeña rodeado de bellas señoritas en bikini, haciendo una megafiesta que ya nos gustaría a muchos. Este es el puto problema de estos hijos de mala madre maricomplejines progres de mierda, su puta envidia que les corroe por dentro, lo enfermos mentales que son y las taras cerebrales de nacimiento que jamás conseguirán que se lo pasen tan de puta madre como il cavaliere. Porque son gente que no disfruta con los placeres de la vida, sino que lo hacen con el mal, lo retorcido, lo enfermizo, el joder la vida de los demás simplemente por pura envidia y porque, como se sienten unos fracasados vitales, todos tenemos que estar igual por sus jodidas locuras enfermizas. Pero qué asco de personas.Estos hijos de puta se llenan la boca pregonando la libertad sexual, que para ellos es dejar preñadas a niñas de once años para que luego se enchufen la píldora y hacer encuestas a niños de catorce años para saber si se enculan. ¿Esa es la sana sexualidad que pregonan estos tarados de mierda? Pues yo prefiero ver a Berlusconi con tres esculturales monumentos sentados en su regazo o a Sarkozy de fiesta con la Bruni en su barquito, algo que también criticaron hasta que se les cayeron los dientes. Eso es ser personas sexualmente sanas, presidentes sin complejos a los que les gustan las tías buenas y que se lo pasan bien FOLLANDO, no metiéndose bolas chinas por el ano mientras ven los desinformativos de Lorenzo Milá, como hace el ministro-puta Miguel Sebastián. Envidia siente el mequetrefe iluminado Zetaparo, que en su poltrona anormal no consigue tener a diez maricas en tanga o vestidos de castigadores que fustiguen su asqueroso culo para conseguir su desviado y enfermizo placer. Por eso, en lugar de seguir los ejemplos de los mandatarios italiano y francés, el muy hijo de puta busca satisfacción en mandar a cuantos más españoles mejor al paro, hacer de España un nido de escoria delictiva y criticar a aquellos a quienes tanto envidia.
Agregándose a las perturbadas envidias naziprogres nos encontramos a las cadenas de váter al servicio del régimen, con los típicos programuchos de mierda donde no hay nada mejor de lo que hablar que de cómo Berlus le toca las tetas a una de las pájaras que sale en las fotos. Imágenes que por cierto, y según los servicios desinformativos de tan culturales espacios televisivos, han sido censuradas por el ejecutivo italiano y no deja que se vean. No lo entiendo, entonces ¿cómo cojones las estamos viendo ahora nosotros? Yo creía que la censura era otra cosa, pero me parece que ni esa palabra saben lo que significa toda esta caterva de lameculos zapaterianos de los cojones. El siguiente comentario es mejor, afirmando que toda Italia está ya harta de los desmanes y golfeos de su presidente. Será por eso que cuando hay elecciones Berlusconi saca cada vez más y más diferencia a todos sus rivales. Me da que a la gente NORMAL (que poca queda en España) se la suda completamente que un tipo folle o deje de follar con quien le salga de las pelotas. Lo único que quieren es que resuelvan sus putos problemas de trabajo, delincuencia, inmigración abrasiva y demás. Esto es lo que hace Berlusconi y no vosotros, asquerosos nazisociatas enfermos de los cojones.
