Y todo esto según las cifras del desgobierno, manipuladas y maquilladas tanto como a ellos les parece, con gente que ya ve las colas y ni siquiera quiere apuntarse a las listas del paro. ¿Para qué, si ya ni dan la prestación porque las arcas están vacías? Eso sí, si eres negrito o sudaka corre a apuntarte, que aquí hay pasta para todos vosotros, y de paso pedís un poco más que seguro que os la dan porque hay que ser progre y tolerante y no un facha parado xenófobo de mierda que se muere de hambre en la calle mientras reclama lo que es suyo. Tampoco salen en estas cifras todos aquellos a los que los teledirigidos funcionarios incitan a hacer un cursillo ocupacional. ¿Eso me va a dar trabajo? Pues no, oiga, pero es que así hay menos paro en España y eso nos beneficia a todos y tal y cual. La verdad es que sólo beneficia a los hijos de mala madre de Moncloa, pero es que ya da igual. Si con las cifras que hay nadie levanta un dedo y todos le siguen votando, pues me da que ya es lo mismo que hayan cuatro millones de parados que quince millones. Total, la culpa siempre la tendrán otros.
Y lo mejor de todo es que los progres se ríen, les parece gracioso, siguen cual bobos palmeros lamiendo el culo del malévolo dictador ZP y haciendo risitas y gracias sobre los parados. Como nuestro amigo el Gran Capulling, sí, ese esperpento de ser humano con cara de espantapájaros que presenta un programucho en La Secta. Un tipo que ha decidido que sus mejores sketches y bromitas las tiene que centrar en la tragedia que viven millones (y digo bien, millones) de personas y familias a consecuencia del desempleo. Un problema creado exclusivamente por deseo explícito de su amiguito, el infrahumano ZP, y toda su caterva de colegas anormales que continúan partiéndose la caja de la situación de toda la gente que se muere de hambre en España. Y como los votantes y simpatizantes del PSOE son tan BUENA GENTE, continúan dando su apoyo a esta panda de hijos de puta para que puedan matar de hambre a más personas, para crear más situaciones desesperadas, más miseria y más pobreza en personas otrora pudientes. Y se ríen, y se jactan de sus proezas, y luego se llenan la boca con sus políticas de mierda sobre maricas, rameras y negros traficantes. Me cago en vuestra puta madre, anormales de mierda.