Ya podemos esperar a que los sindimierdas organicen una huelga general, ya, encima dan todo su apoyo al desgobierno y dicen que jamás en España hubo un ejecutivo que se preocupara tanto por el trabajador. Es que esto ya es de viñeta de chiste, joder. Claro que, lanzando a los cuatro vientos que la cifra que hemos conocido hoy del paro en marzo es "muy positiva", pues ya me dirás tú. Más de 120.000 personas más sin trabajo y al desgobierno y sus sodomizados secuaces sindicales les parece de puta madre. Pues nada, hombre, el mes que viene un millón más y os seguís aplaudiendo a vosotros mismos, que está la cosa de pelotas. Pero no acaba aquí el surrealismo y el cachondeo que se llevan los sindimierdas. Ahora nos dicen que lo importante no es pelear por conseguir más empleo, sino por unas condiciones laborales dignas. Pues oiga, mire, me parece muy bien eso que dice usted de las condiciones y tal y cual, pero es que si no hay trabajo no sé sobre qué cojones quiere usted aplicar la dignidad. ¿Para qué huevos queremos tener las condiciones más de puta madre del mundo mundial si luego no tenemos un mísero trabajo con que disfrutarlas? Insisto, esto es de chiste.
Y espérate, que cuando algunos periodistas han incomodado a los susodichos dirigentes sindicales con preguntas en este sentido, vamos, reclamando que actúen contra la taradura mental del desgobierno y el aberrante desempleo, los tipos encima se han puesto farrucos. Levantando la voz e insultando por doquier a todo el que pudiera meterles en un aprieto, los muy cabrones se ponen a gritar a los cuatro vientos que no van a hacer lo que digan "cuatro ridículos opinadores", porque ellos están AL SERVICIO DEL TRABAJADOR. Jajajajaja, es que esto ya es para mondarse de risa y tirarse por el suelo. ¿Pero esta peña de verdad está en este planeta, viven en este país, han salido a la calle, tienen ojos y orejas? O sea que, y recapitulando sobre todas las locuras surrealistas lanzadas por estos perturbados sindicales, ahora resulta que los trabajadores quieren no tener trabajo, no cobrar un duro, morirse de hambre, pasar olímpicamente de que las cifras de paro aumenten y vivir todos como míseros vagabundos. Aunque bien mirado, y con la cantidad de hijos de mala madre que le siguen votando al PSOE, a lo mejor hasta tienen razón y todo y los españoles lo que quieren es residir en alcantarillas. De verdad que... vaya tela.