miércoles, 3 de febrero de 2010

Sólo es un mal sueño

Hace días comentaba esa sensación que tengo de estar ya muerto. Las cosas que veo no pueden ser reales, seguramente ya he abandonado mi existencia y todo aquello a lo que creo asistir en vida está ya al otro lado y viceversa. Ayer atisbaba otra posibilidad, la del sueño. Sí, esto también podría ser un sueño, una pesadilla, una larga pesadilla. Tanto dolor y sufrimiento no pueden ser reales. Cualquier día de estos me despertaré y veré que aún estoy en febrero de 2004. Joder, he dormido casi veinte horas seguidas, con razón me habían parecido años. Entonces hasta puede que escriba un libro contando este extraño sueño que me ha turbado de semejante manera. Más que nada para dar a conocer lo que sucedería si un personaje tan nefasto como Zetaparo algún día llegara al poder en España. Sí, eso debe de ser, un sueño. Ayer me dormí dentro de este sueño y soñé cosas mucho más normales y reales. Está claro, fue una especie de despertar, imágenes reales que oía mientras intentaba despertar de esta pesadilla eterna. Espero que sea eso, solamente eso, por Dios, necesito despertar de esta locura.

Lo último dentro de esta cruenta pesadilla es el ridículo internacional (nada nuevo) en el que España sigue inmersa. Los desplantes del moreno a Zetatonto. La conjunción planetaria del travelo se desvanece. Ahora resulta que lo que los manipulados medios progres nos han vendido es todo una mentira, o incluso peor, una jodida invención de cerebros realmente putrefactos. El mesías medionegro pasa olímpicamente del lunático monclovita. Quizá porque sabe que es un cagallón, un lelo y un tarado mental que lo único que conseguiría es arruinar su imagen a pasos agigantados, o quizá porque los Estados Unidos se están yendo al carajo desde que su oscuridad mediática llegó a la Casa Blanca. El caso es que a mí no me cabe la menor duda de que si la cumbre europea se celebrara en otro país que no fuera el de los nazisociatas feminazis y su población aborregada, seguramente el moreno acudiría. Una foto con Merkel o Sarkozy sí que da prestigio, una instantánea con un pedazo de mierda simplemente huele mal.

Un pedazo de mierda que aparte de inútil y lunático también demuestra ser un chulo despótico. Buen cañazo le metieron los británicos en Bruselas, insistiendo en que dejara de dar consejos iluminados por Europa y se dedicara a arreglar las barbaridades y tropelías que había cometido en su propio país. Lejos de aceptar la recomendación o cuanto menos callarse, lleno de soberbia y prepotencia, el dictador caraculo se encaró con el británico para asegurar que las medidas que había llevado a cabo en España y sus aberrantes resultados eran una garantía más que suficiente para exportar sus chaladuras mentales al resto del continente. Sigue así, majo, a ver si nos tiran de Europa de una puta vez y entonces ya sí que nos hundimos definitivamente en la miseria y comenzamos una guerra civil que mande tu culo lejos, muy lejos de tu jodida poltrona, a ser posible al otro barrio. Es lo que hay, nos hemos convertido en el hazmerreír de Europa y del planeta entero. Claro que, cuando veo el cine que intentamos exportar o las propias series que se emiten dentro de nuestra nación, pues es normal que se rían de nosotros. Vamos, ridículo garantizado. Pero es un sueño, sólo un jodido mal sueño.
 
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