martes, 9 de diciembre de 2008

Un paseo por los noticiarios

Me gusta ver los informativos de mediodía de Antena 3. No es que las noticias me parezcan mejores o peores, pero siempre es un atractivo para la vista poder echarle un ojo a Pilar Galán, compañera de estudios (y de algo más) del Vikingo Macabro haca ya unos cuantos añitos. También es verdad que prefiero ver un telediario sin una descarada manipulación. Aún así, de vez en cuando, y siguiendo esa frase que dice que es bueno conocer a tu enemigo, me doy un paseo por La Secta, Cuatro o la más vergonzante de todas las cadenas españolas a día de hoy, TVE. Es así como veo que en la Primera se da más bombo a la fiesta del cordero musulmana que al día de la Inmaculada, aunque no nos debería de extrañar si tenemos en cuenta de quién depende esta entidad, de un lunático monclovita que asiste a la celebración final del Ramadán en España mientras ordena eliminar crucifijos de las escuelas a velocidad de vértigo.

Cierto es que en estos últimos días el denominador común de todos los informativos han sido las batallas campales de Grecia. Muy moderados los jóvenes estos de extrema izquierda, como se puede apreciar. En cualquier caso, y fuera de todo tipo de interpretaciones, mientras veía y escuchaba la noticia me hacía especial eco de la dimisión del ministro del interior griego. Veamos, un policía mata a un joven (accidentalmente o de forma premeditada, eso se tendrá que investigar) e inmediatamente y por simple vergüenza ajena, el ministro en cuestión presenta la dimisión. Ahora yo me pregunto, si en España sucediera algo similar ¿dimitiría Rubalcabrón? Que no me conteste nadie, es evidente la respuesta. Lo más grave es que no hace falta exponer el condicional de si en España sucediera eso, es que en nuestro país han sucedido cosas mucho peores, mucho más graves, vergonzosas y siniestras, y el hijo de puta de la barbita continúa ahí impasible, cual candela que nunca se extingue. Ya lo creo que nunca se extingue, después de todos los escándalos de corrupción en los que estaba involucrado con el ejecutivo felipista y el tío vuelve a los ministerios. Alucinante. Es España.

Y ya que hablo de Rubalcabrón, últimamente se le ha visto muy activo con las numerosas detenciones de etarras. Vamos, hasta los ultramegaprogreguays de La Secta ahora dicen que estas detenciones son una "excelente noticia". ¿Estos no cargaban hace unos meses contra la AVT por decir que lo de De Juana era una vergüenza? Es lo que tiene seguir los designios de un desgobierno chiflado y darle siempre la razón, que al final acabas haciendo el mismo ridículo que ellos y cayendo en las mismas incongruencias estúpidas. A mí lo que más gracia me hace (puñetera gracia) es ver a unos anormales inhumanos como son los que forman el gabinete zapateril que durante cuatro años se cruzan de brazos con respecto a ETA, les llaman hombres de paz, guerrilleros por la paz y demás sandeces, mientras ponen el culo, permiten su rearme y les dan alas para hacer todo tipo de burradas, y ahora de pronto, cuando se han visto con la mierda entrando por la boca, han empezado a achicar la piscina a marchas forzadas. Lo que pasa cuando las cosas se hacen así es que la mierda salpica, y vaya si salpica, y va a seguir salpicando, pero por doquier.

Eso sí, los desvíos de atención constantes que este desgobierno necesita para no hablar del paro y las cacicadas económicas que han instaurado en este país por puro divertimento, ya están sobre la mesa. Por no hablar de las típicas noticias sobre "violencia machista" (cómo se les llena la boca cuando lo dicen) o las típicas cabalgatas de mariconas que cuando acontecen son la noticia más importante del día. Y de paso asistimos a un país en el que se pierden los valores al grito de viva la mierducación para la ciudadanía y todo el que se oponga a nuestro lavado de cerebro es un "facha de mierda". A todo esto, los inmigrantes nos siguen invadiendo mientras algún que otro ministro que debería estar en un puto asilo se va una vueltecita por África pidiendo más mano de obra extranjera, y el paro continúa subiendo en progresión geométrica. Y ya dentro de los despropósitos más aberrantes nos encontramos con una madre que se va al talego por darle una bofetada a su hija. Estudiando la sentencia, me pongo en el lugar de la madre, y viendo que las consecuencias van a ser las mismas, en lugar de darle una bofetada a mi hija, le pegaría un tiro al hijo de puta de Zapatero. Cuánto descansaríamos todos.
 
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