domingo, 1 de noviembre de 2009

Estrategias nazis en un país imbécil

Cuando uno es un inútil y un incompetente absoluto, su única estrategia para seguir aferrado a un poder que no se merece es intentar inculcar que los demás son aún peores que él. Y en el país de la ciudadanía agilipollada y el mayor número de subnormales profundos por metro cuadrado es la estrategia ideal. Todo esto, por supuesto, por mediación del insulto, la falacia, la descalificación injustificada y la estupidez integral. Ahí estaba ayer el PSOE, mostrando su cara más nazi y fascista, utilizando las mismas tácticas que usó hace más de setenta años el propio Adolf Hitler, manipulando, comiendo bolas y apartando a todos sus posibles rivales. Manifestación por las calles de Valencia contra el Partido Popular, porque así de hijos de puta son toda esta caterva de simpatizantes y votantes anormales de la escoria nazisociata, así de tolerantes son. Acusando a Francisco Camps de algo que no está ni demostrado, pidiendo su dimisión, insultándole a él y a toda su familia, y ya de paso lanzando todo tipo de burradas y vociferaciones contra todos aquellos que no pensamos como las perturbadas mentes que anidan en las sucias cabezas de estos excrementos humanos. Patético espectáculo en un país "democrático".

Pues mira, es que aunque el tal Camps haya chorizado o robado, que no está ni demostrado, a mí me la suda totalmente. ¿Sabéis por qué? Porque mientras no me joda la vida, ni me quite el empleo, ni el dinero, ni la comida, ni la familia, me la suda veinte mil veces lo que haga él o Perico de los Palotes. Lo que no me la suda es que un hijo de mala madre neurótico y chiflado haya llevado al país a la ruina y haya jodido las vidas de millones de sus ciudadanos sólo por su puto capricho y el de sus leyes paranoicas. Pero contra el malparido de Zetaparo y sus jodidos secuaces nadie se quiere manifestar, no hay cojones, no hay nada, contra lo que realmente nos preocupa y nos importa nadie se mueve, estamos en un país de zombies anormales retrasados mentales. Quinientos imbéciles llamando hijo de puta a Pellegrini porque su equipo ha perdido un partido, pero cuando pierden el trabajo no tienen cojones a definir por el mismo apelativo y a la cara al loco perturbado que anida en Moncloa. Cinco mil personas tirando huevos a los jugadores del Betis por bajar a Segunda División pero quietecitos como momias mientras pierden su trabajo y sus ingresos.

España da asco, definitivamente. La estrategia comebolas del partido nazisociata funciona a la perfección, especialmente con los maniquíes alelados que ahora mismo conforman el panorama de la ciudadanía española. Los manipulados medios insultan a cualquier partido de la oposición para intentar demostrar que la inutilidad absoluta del puto PSOE es lo mejor que nos puede pasar, los votantes nazis son auténticos hijos de puta que sólo saben soltar sapos por la boca cuando se toca a su líder iluminado porque razonar, para gentuza con tan poco cociente intelectual, es algo que no entra dentro de sus posibilidades. Se ve que nos gusta estar en el paro, arruinados, que nos jodan la vida, que nos entaleguen por falsas denuncias de violencia machista, racista, zoofílica o gilipollística. Y los que no tragamos con toda esta mierda encima somos marginados, acribillados, insultados, encarcelados, denostados, asfixiados, nos hacen la vida imposible más todavía por luchar por nuestras vidas y nuestra patria. Pues si queréis expulsarnos de España, lo habéis conseguido, quedáosla para vosotros enterita y haced lo que os salga de los cojones con ella, que os den por el culo y así se os atragante. Yo ya estoy hasta los huevos de tanto hijo de puta.
 
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