miércoles, 10 de marzo de 2010

Temporal en Cataluña

Cataluña inundada por la nieve. Bueno, esto les pasa por ser tan ávaros con su propia agua. ¿Querían agua? Toma agua, toma nieve, es lo malo de pedir cosas que no hacen falta, que al final te son concedidas hasta que te salen por las orejas. Ahora lo que espero es que este verano no se repita la cantinela de que se mueren de sed y necesitan que todo dios les dé lo que ellos no quieren dar. Claro que son tan inútiles que acabará siendo así. El caso es que llevan al consejero de Interior, el tal Saura, a caer de un burro. Parece ser que no hubo previsión en cuanto a la nevada y así está ahora Cataluña, carreteras cortadas, coches atascados en ellas, cientos de miles de abonados sin recibir servicio eléctrico, personas aisladas a kilómetros de sus casas, pernoctaciones en polideportivos, estudiantes atrapados en universidades (aprovecha Zetaparo, es el momento de lavar cerebros), infraestructuras varias que se han ido al garete... En fin, esa Cataluña que presumía ser una "nación europea" convertida más bien en pueblecito tercermundista. Y todo por la gracia de una clase política inútil, incompetente y gilipollas hasta la médula. Pues eso, como la del desgobierno central, no se van mucho.

La gran pregunta a estas horas es si debería haber dimisiones, y ya os contesto yo, sería lo más lógico y necesario, pero ya os anticipo que aquí no se mueve ni su puta madre. Mira, por una vez no voy a meterme con el hijo de puta de Zetaparo, y es que el servicio de meteorología es una transferencia a las comunidades autónomas. Responsables por tanto de la desgracia catalana son única y exclusivamente los propios catalanes. Sí, majos, vosotros, los ciudadanos, también. Porque los imbéciles que os desgobiernan están ahí por vuestros votos o por vuestros no votos, me da igual. Aún recuerdo toda la mierda que en 2007 estaba cayendo sobre el tripartito y a los catalanes, obcecados y tarugos como ellos solos, les dio absolutamente lo mismo. Vuelta a votarles y vuelta a desgobernar los mismos tarados. Y digo bien, tarados, porque no es de estar muy bien de la cabeza, señor Saura, que se avecine la que se avecinaba y usted se largue a las Baleares a hablar sobre los països cagalans. Sí, ya sé que la abstención en Cataluña también es muy elevada, pero abstenerse a ejercer el derecho al voto ante semejantes atrocidades es como ser cómplice de los que apoyan a esta pandilla de cerdos mercenarios vividores sin principios. Y es que aún recuerdo la escena de algún diputado de ERC poniéndose ciego a caviar, champagne y putas en Madrid, allí donde no le pueden ver los suyos.

Yo sinceramente no sé para qué me meto en estas historias. Al fin y al cabo esta gente no quiere ser española, así que no debería sentir ninguna lástima sobre alguien que no es mi compatriota y si pudiera me pegaría una paliza por haber nacido en España. Ya estoy acostumbrado a recibir amenazas de muerte e intentos de agresión, ciertamente cada vez salgo menos de casa. Me jode, aunque no debería, que todo esto venga cada vez de gente más joven, niñatos malcriados de papá, chavalines con la mente carcomida por un deleznable sistema educativo y por unos centros que en lugar de educar adoctrinan en el odio, la violencia y una extraña ideología de catadura moral bastante baja, por no decir nula. Pésimo futuro el que le espera a esta nación, aunque tampoco el presente es que sea mucho mejor, con casi un 30% de paro y un puñado de imbéciles dando loas a un desgobierno de perturbados mentales. O con hijos de puta tales como el tal Willy Toledo o el malparido de Miguel Bosé. Este último ahora quiere comparar a Cuba con la Comunidad Valenciana. Hay que ser estúpido integral, carroñero, cejudo y sinvergüenza. Sigue sirviendo a tu dictador iluminado, Bosé de los cojones, que el día que alguien le meta una bala entre ceja y ceja, posiblemente tú seas el siguiente.
 
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